No hay fecha que no se llegue y decisión u orden ejecutiva que no se cumpla…

El 20 de enero llegó y con ello un nuevo periodo gubernamental para el gobierno de los Estados Unidos de América, con la designación del presidente número 47, cargo asumido por el magnate Donald John Trump.

La fecha será histórica, principalmente para América Latina, porque el gobierno estadounidense derogó varias acciones y decisiones contra la inmigración, por si fuera poco, se fija el 1ero de febrero como fecha exacta para que Trump aplique aranceles del 25% a varios productos que comercializa con México y Canadá.

Hoy algunas advertencias, señalamientos y frases políticas emitidas por el magnate en sus mítines políticos ya son órdenes ejecutivas que en breve estarán afectando a algunos países.

Tal parece que la prisa por presentar trabajo rebaza al nuevo mandatario estadunidense, el que estará haciendo historia por sus posturas radicales.

A pocos días de asumir el cargo Trump ha firmado varias acciones, órdenes ejecutivas y memorándum presidenciales de suma relevancia para su país, lo que le está generando credibilidad y confianza entre los estadounidenses, favoreciendo su simpatía y popularidad al partido republicano.

La intención de Trump es de firmar más de 100 órdenes ejecutivas por día, ya que desea ganar popularidad y apoyo de todos los sectores estadounidenses.

Una de las estrategias que está utilizando Trump es la “retórica del miedo”, discurso del que se vale para generar terror y persuadir a contrincantes, adversarios y a gente que no desea tener en su país.

El uso de la retórica le está generando un protagonismo inusitado y juega un papel fundamental en su gobierno, activando diversos sentimientos incluidos el terror, la angustia y la intimidación como ejes principales de instrumentos políticos para cumplir sus objetivos y alcanzar las metas trazadas.    

El republicano ya consideró emergencia nacional a la frontera entre Estados Unidos y México, por lo que ya inicio el desplazamiento de soldados para apoyar y servir en otorgar seguridad a la frontera sur de Estados Unidos y hacer frente a la inmigración.

Entre las acciones se encuentran el uso de helicópteros para colaborar en los trabajos que llevan a cabo los agentes de la Patrulla Fronteriza y realizar la construcción de barreras.

Asimismo, se tienen disponibles aviones militares para efectuar vuelos de deportación de migrantes detenidos.

Ante la incertidumbre, la duda o la incredulidad de algunos gobiernos que dudaban de las posturas radicales del magnate, la sorpresa fue mayúscula y hoy Trump asumió su palabra, las acciones se concretaron.

Donald Trump se comprometió ante su electorado y simpatizantes en llevar a cabo diversas acciones ejecutivas desde el primer día de su mandato.

El magnate llega fortalecido y con el respaldo de más de 50 millones de estadunidenses que votaron por él y el apoyo de los legisladores republicanos que lideran las cámaras de representantes y el senado.

El presidente estadounidense ya analiza la posibilidad en breve, de invocar la Ley de Insurrección de 1807, con ello se les permite a los militares establecidos en la frontera, asumir las funciones de aplicación de la ley, labor que realizan las fuerzas de seguridad.

Y los que no se intimidan son los inmigrantes que aún mantienen la fe y la creencia de posibilidad de ingresar a los Estados Unidos para lograr y cumplir el sueño americano.

A pesar de que se ha hecho hincapié en las deportaciones expeditas como acción política de la aplicación de las leyes de inmigración, miles de personas siguen activas y en movimiento en espera de lograr el sueño americano.

Las leyes migratorias y los jueces de migración serán las grandes barreras que pudieran frenar en cierta medida las deportaciones masivas, ya que las leyes otorgan derechos y garantías individuales a todo inmigrante que tiene una permanencia mayor a dos años en ese país.  

La narrativa del miedo ya forma parte de los instrumentos políticos del magnate, conocedor de las emociones que genera entre las personas y los gobiernos, promueve la polarización, incertidumbre, temores y odio con un giro radical como contrapeso para lograr confianza y esperanza a sus compatriotas.

Y las Remesas….?

Ante las medidas radicales de deportación masiva que lleva en marcha el gobierno estadounidense, la economía de algunos países en breve tiempo pudiera colapsar, caso concreto la de México y otros países de América Latina, en la que miles de migrantes envían cientos de dólares desde las diversas tiendas departamentales cada semana a sus familiares que se encuentran en sus países de origen para que cubran sus gastos básicos.

Ahora existe la posibilidad de que el gobierno del magnate Trump en coordinación con legisladores apruebe y aplique nuevos impuestos para controlar la transferencia de dinero que se envía al extranjero y a la vez ello contribuiría a dar con el paradero de los migrantes que realizan los envíos de dinero y revisar su estatus migratorio.

Entre las medidas destaca imponer un impuesto del 10 al 15 por ciento sobre toda trasferencia que se realice al extranjero para tener un mayor y mejor control como medidas de seguridad financieras para detectar y evitar acciones ilegales. 

Algunos republicanos ya analizan esta estrategia recaudatoria hacendaria, ya que de aplicarse el nuevo impuesto para las remesas generaría millones de dólares extras al gobierno de los Estados Unidos y a favor de cada entidad federativa que trabaja para el control y seguridad de sus fronteras y el flujo migratorio.  

El Banco Mundial estimó que México en 2021 recibió el 7.1% del flujo de remesas a nivel mundial y que ocupó el segundo lugar en el volumen de remesas recibidas, solo después de la India.

En 2022, México recibió 58 mil 868 millones de dólares por remesas con un crecimiento de 13.4% respecto al año anterior, rompiendo nuevamente récord en la historia del país.

De acuerdo al Banco de México, en el 2023 el valor de los ingresos por remesas fue de 63,313 millones de dólares, monto mayor al de 58,868 millones de dólares reportado en 2022 y que significó un crecimiento anual de 7.6%.

En el 2023, el 99.0% del total de los ingresos por remesas se realizó a través de transferencias electrónicas, al ubicarse en 62,649 millones de dólares.

Las remesas que se realizaron en efectivo o en especie por las money orders representaron el 0.8 y 0.2% del monto total, al registrar niveles de 526 y 138 millones de dólares.

En 2024, en el periodo de enero a noviembre se alcanzó un ingreso por remesas de 59,518 millones de dólares, mayor al de 57,822 millones de dólares registrado en el mismo lapso de 2023, lo que registró un incremento anual de 2.9%.

Si se analizan los datos antes citados, las remesas han representado un flujo económico importante para México, solamente en el mes de noviembre de 2024, los ingresos de remesas que llegaron del exterior fueron 5,435 millones de dólares.

Existe la posibilidad que para los próximos días disminuyan las remesas con las deportaciones masivas de migrantes que viene efectuando el presidente Donald Trump, lo que afectaría sin duda a miles de familias mexicanas que dependen de estos ingresos, mermando la economía local y nacional y provocando una crisis social.

Una preocupación enorme se encuentra presente entre los miles de migrantes que hoy están en los Estados Unidos y de sus familias que se ubican en sus países de origen, el retorno masivo ya inicio, por lo que una crisis económica pudiera suscitarse en breve, ante la suspensión de ingresos en los hogares de los inmigrantes, provocando una severa afectación en sus condiciones de vida.

Así las cosas…

¿Y Usted, qué opina?

Nos vemos a la próxima.

calialvarez@hotmail.com

Carlos Álvarez

Analista y Auditor. Consultor Externo. Certificado ante el Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE).

Libros publicados: “El Tamaulipas y el México que Anhelan los Jóvenes para el Siglo XXI”, “El Gran Juicio” y “El Lago Encantado y el Maravilloso Pueblo Azteca”. Escribe en varios medios de comunicación del Estado.